Los beneficios de correr y las lesiones comunes al hacerlo

Correr, también conocido por anglicismos como running, footing o jogging, es un ejercicio de carrera continua, a la marcha de intervalos regulares.

La carrera es uno de los deportes inherentes al ser humano, es uno de los más comunes, si no es que es el más común. Correr tiene múltiples beneficios para el sistema cardiovascular y pulmonar, además de mantener útiles y ejercitados diferentes tejidos musculares, ligamentos y tendones al asegurar una mejor lubricación en las articulaciones. En algunos casos el correr también puede regular el apetito y facilita la digestión, y mejora la calidad del descanso ya que el cuerpo lo necesita más debido al esfuerzo. Además de quemar calorías y mejorar el aspecto físico también ayuda al aspecto psicológico ya que permite a quien lo practica desconectar de otras rutinas de la vida y marcarse objetivos.

Pero incluso un deporte como el correr puede generar lesiones, es necesario empezar con una pequeña caminata de calentamiento y ejercicios de estiramiento antes de comenzar una carrera más intensa. También es necesario llevar el calzado adecuado que se ajuste a tu nivel de carrera y a tus pies, el calzado ayuda a amortiguar el impacto sobre los pies, las rodillas y la espalda.

Las lesiones más comunes entre corredores son:

Fascitis Plantar: Produce una inflamación de la membrana que recubre los músculos de la planta del pie. Se puede producir por calzado incorrecto, sobrepeso, o una mala erogación.

Tendinosis Aquiliana: Los tendones se lesionan a lo largo del tiempo, debido a una sobre exigencia repetitiva. Al mantener la exigencia sobre el tendón supera su capacidad de adaptación y recuperación y se produce un cambio estructural en él.

Bursitis: Es una inflamación que se sitúa entre huesos, tendones y músculos. La función de una bursa es facilitar el movimiento y reducir la ficción entre todas las partes móviles.