¿Cuáles son las razones por las cuales la Proloterapia podría no funcionar?

Existe un pequeño el riesgo, como en cualquier procedimiento médico, de que el tratamiento no funcione al cien por ciento. Los resultados nunca se pueden garantizar. La Proloterapia es un tratamiento con altas posibilidades de éxito. Hasta un 90% de los pacientes que son candidatos viables para recibir el tratamiento responden de forma exitosa, mientras que el 10% restante no lo hace.

El que alguien no responda al tratamiento se puede debe a varios factores. En primer lugar, la capacidad que tiene cada persona para sanar. Algunas personas tienen problemas para sanar o para producir colágeno nuevo y fuerte. Otros factores que pueden interferir en la curación pueden incluir algunos medicamentos que la persona esté tomando, que la persona sea extremadamente activa, lo que puede resultar en que se vuelva a lastimar; que empeore el área que se está tratando, una mala nutrición, el fumar (ya que interfiere con la reparación del colágeno), o problemas severos para dormir.

En segundo lugar, la Proloterapia puede no funcionar cuando existe demasiado daño como en el caso de una articulación severamente degenerada, un tendón completamente roto o la degeneración del hueso, que sean la causa del dolor.

Finalmente, la Proloterapia puede no funcionar si existe algún otro factor que cause el dolor (por ejemplo, que no sea realmente un problema músculo-esquelético; es decir, que exista un proceso de enfermedad anterior).