Lesiones en la natación

La natación es uno de los deportes más completos y exigentes que existen, quienes practican de forma regular este deporte someten sus articulaciones a movimientos extremos.

Las lesiones en la natación suelen afectar: hombros, rodillas, caderas o espalda, dependiendo claro, del estilo de natación que se practique.

Las lesiones en la natación se producen de la misma forma que en la mayor parte de deportes, la mala técnica en la ejecución de ciertos ejercicios, el sobre esfuerzo, la falta de reposo y el desgaste muscular. Quienes practican la natación ganan una gran elasticidad o laxitud articular, pero también sufren de pequeñas lesiones y micro trauma pueden hacer que los hombros se vuelvan inestables y presenten dolor y tendinitis. Otras lesiones por desgaste repetitivo incluyen problemas en las rodillas, cadera y espalda en determinados estilos de natación.

Las lesiones más frecuentes son:

Hombros: el hombro la articulación que mayores molestias genera a los nadadores, las lesiones del hombro pueden problemas en del manguito rotador, tendinitis   e inestabilidad del hombro, en la cual las estructuras que rodean la articulación del hombro no logran su función de mantener la cabeza del humero dentro de la cavidad glenoidea, todo puede resultar de fatiga y debilidad de manguito rotador y los músculos que lo rodean.

Lesiones en la parte baja del cuerpo: Las lesiones de rodilla para los nadadores suelen afectar los tendones y ligamentos. Los nadadores de estilo pecho también sufren de dolor de cadera por inflamación de los tendones.

Los problemas en la espalda: Incluyen problemas de discos de región lumbar o algún otro problema en la espondilólisis.