Lesiones por caída en equitación

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Todas las personas que montan a caballo tienen el riesgo de padecer una caída, independientemente de su experiencia montando. Hay muchos factores que determinan el peligro de una caída, entre los que se pueden incluir, la actitud del caballo, la experiencia del jinete, la causa de la caída y el equipo.

Las caídas de los caballos pueden tienen como consecuencia lesiones de diferentes grados típicas entre los jinetes. Una caída leve puede generar desde un golpe duro, hasta un traumatismo que pueda romper las costillas, la clavícula, o sufrir alguna fractura de vértebra. Los jinetes que sufren de una caída y no llevan casco, pueden resultar hasta en un 60% en ingreso hospitalario debido a algún traumatismo cráneo-encefálico, en algunas disciplinas donde el jinete debe llevar casco, el porcentaje se reduce. El resto de ingresos hospitalarios se dividen entre lesiones blandas, tren inferior y superior.

Los jinetes de algunas disciplinas pueden agarran las riendas del caballo durante las caída para que no se escape el equino, lo que puede producir fracturas en los dedos de las manos y luxación anterior del humero. Sin embargo, este reflejo permite caer muchas veces de pie al jinete y frena la velocidad de la caída, lo que afortunadamente evita que golpes más fuertes y delicados en la espalda o en la cabeza.

Al practicar equitación como cualquier otro deporte, para evitar lesiones es importante usar el equipo adecuado, contar con un instructor calificado y seguir sus indicaciones.

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